La transformación ya no es una iniciativa para los responsables de TI en las empresas; es una constante.

Ya sea impulsado por fusiones y adquisiciones, cambios en la cadena de suministro o presiones normativas, el cambio se produce ahora en ciclos más cortos y con mayores riesgos.

Para mantener el ritmo, las empresas necesitan algo más que una toma de decisiones rápida: necesitan sistemas y datos que estén preparados para usar cuando la empresa los necesita. Así es la verdadera agilidad empresarial hoy en día: flexible, transparente y modular.

Y todo comienza con la base que permite que los sistemas SAP se adapten al cambio.

Agilidad empresarial: lo que significa para los responsables de TI

La agilidad no consiste solo en reaccionar con rapidez. Se trata de estar estructuralmente preparado para actuar sin interrupciones. Ese tipo de preparación no se consigue en talleres ni con eslóganes. Se consigue con sistemas, procesos y datos que se pueden cambiar cuando la empresa lo necesita, sin meses de reprocesamiento.

Aquí es donde importa la componibilidad. Cuando los sistemas son modulares y están poco acoplados, se pueden hacer cambios en un área sin romper otra. Para las empresas que utilizan SAP, especialmente las que se trasladan a Cloud ERP o SAP S/4HANA, esto significa crear una arquitectura diseñada para el cambio continuo, no solo para una única puesta en marcha. Con una base modular, la agilidad deja de ser una palabra de moda y pasa a ser parte de la empresa. Pero antes de desarrollar la agilidad, hay que eliminar lo que la bloquea.

Lo que bloquea la agilidad en entornos SAP

A la mayoría de las grandes empresas no les falta visión, sino que están atascadas en sistemas que no se construyeron para el cambio. Tomemos como ejemplo la introducción de un nuevo modelo de negocio o la escisión de una unidad regional. En muchos entornos SAP, esto puede dar lugar a una serie de complejidades técnicas: código personalizado que requiere ajustes, integraciones rígidas que hay que rehacer y dependencias de datos que son difíciles de visualizar por completo. Lo que debería ser una iniciativa empresarial se convierte en un proyecto de TI de nueve meses.

Incluso los trabajos de transformación básicos (como la consolidación de sistemas, el trasladao a la nube o la actualización a SAP S/4HANA) suelen verse ralentizados por:

• Arquitecturas estrechamente acopladas en las que cada cambio que se realiza en un área repercute en otras tres.
• Datos aislados y herramientas obsoletas que dificultan la obtención de una visión completa de lo que se está ejecutando dónde.
• Procesos manuales de pruebas, archivo o validación de datos que no pueden ampliarse.
• Proyectos dispersos, en los que varios equipos trabajan en iniciativas que se solapan sin una coordinación centralizada.

La base de la agilidad: componibilidad, datos limpios, control continuo

La agilidad no empieza con la velocidad. Comienza con la estructura. Si tu empresa debe adaptarse con rapidez, debes diseñar sistemas hechos para el cambio, y no tener que aplicar parches como respuesta a estos cambios.

Esta base depende de tres cosas:

Componibilidad

Los sistemas modulares y flexibles te permiten adaptar una parte de la empresa sin arrastrar al resto. Ya se trate de desplegar una nueva línea de productos, realizar una adquisición o retirar aplicaciones heredadas, la componibilidad significa que puedes realizar cambios precisos en lugar de grandes revisiones.

Datos limpios

Las decisiones rápidas dependen de datos confiables. Pero en muchas empresas, los datos clave están dispersos, duplicados o desincronizados en los distintos sistemas. Limpiar los datos significa saber dónde están, qué es actual y qué se puede utilizar sin conjeturas.

Control continuo

La transformación es un proceso continuo, no un acontecimiento puntual. Sin una visibilidad constante de los sistemas y procesos, mantener la agilidad puede convertirse rápidamente en un desafío. El control continuo significa tener la capacidad de evaluar, ajustar y realinear periódicamente tus sistemas en tiempo real, de modo que siempre estés preparado para el siguiente cambio, sin tener que empezar de nuevo.

Esta es la base que toda empresa ágil necesita y SNP te puede ayudar a obtenerla.

Veamos cómo la plataforma Kyano pone en práctica esa base.

Kyano: la plataforma creada para la agilidad en entornos SAP

La agilidad se viene abajo cuando los sistemas son rígidos, fragmentados o impredecibles. Kyano está diseñada para solucionar todo eso y ofrecer a los responsables de TI una plataforma flexible y modular que les permita tomar el control de la transformación a lo largo de todo el ciclo de vida de los datos.

Así es como funciona en la práctica:

Desafío número 1: entornos complejos y fragmentados

 Es común que los entornos SAP se vuelvan difíciles de gestionar con el tiempo debido a las múltiples instancias, las personalizaciones superpuestas y las integraciones incompletas.

Kyano Foundation te ofrece una visión clara y siempre actualizada del entorno SAP. Identifica automáticamente las dependencias del sistema, señala los componentes obsoletos y limpia el sistema ERP para eliminar la deuda técnica antes de que cause retrasos.

Desafío número 2: migraciones lentas y arriesgadas

Muchas organizaciones retrasan la innovación porque temen el tiempo de inactividad, las transiciones fallidas o los largos ciclos de migración.

Kyano Move admite la migración selectiva de datos basada en software, para que puedas modernizar los sistemas sin migrar el equipaje innecesario. Te permite agrupar varios proyectos en una sola puesta en marcha racionalizada, que suele ser completada en menos de seis meses.

Pfizer hizo exactamente eso al migrar su sistema SAP de 85 TB a SAP S/4HANA en solo 43 horas, y transfirió selectivamente solo los datos relevantes. Esto racionalizó su entorno ERP, redujo los datos y estructuras heredados y mejoró la eficiencia operativa.

Desafío número 3: gestión manual de datos y pruebas

Tareas rutinarias como el archivo, las pruebas o la retirada de aplicaciones pueden estancar el progreso cuando dependen del esfuerzo manual y de herramientas desconectadas.

Kyano Manage automatiza estos flujos de trabajo. Se lo utiliza para las pruebas end-to-end hasta la gestión del ciclo de vida de las aplicaciones, donde libera capacidad interna y reduce los errores humanos.

Desafío número 4: falta de métricas para evaluar y mejorar la agilidad

No se puede mejorar lo que no se puede medir. La mayoría de los responsables de TI no disponen de una forma de evaluar la agilidad, realizar un seguimiento de los progresos o identificar los puntos débiles.

El Agility Index en Kyano resuelve este problema. Proporciona una evaluación continua del grado de preparación de los sistemas para la transformación, basada en puntos de referencia reales y recomendaciones basadas en el sistema. Piensa en ello como una torre de control para la agilidad a largo plazo.

Con Kyano, la agilidad no es solo un objetivo. Se convierte en una capacidad integrada y medible en la que puedes confiar una y otra vez.

Incorpora la agilidad a tu forma de operar

La transformación seguirá acelerándose. Las nuevas normativas, fusiones y cambios del mercado no esperarán a que tus sistemas se pongan al día. Por eso la agilidad no puede ser un efecto secundario de la buena suerte o de un esfuerzo heroico de TI. Tiene que estar integrada en tu forma de operar.

Con Kyano, SNP te ofrece las herramientas para conseguirlo: datos limpios y conectados, sistemas modulares y visibilidad completa de todo el entorno SAP. Tanto si te estás preparando para SAP S/4HANA, para migrar a la nube o para el próximo carve-out, Kyano te ayuda a realizar el traslado con confianza, no con complejidad. Porque cuando los sistemas están preparados, el negocio también lo está.

¿Quieres saber más sobre la agilidad empresarial en la práctica? Escucha a Tara von Metzen, Head of Products and Innovation de SNP, en el podcast BARC.